Prioridades claras
Justin Bieber a decidido posponer indefinidamente su boda religiosa, bajo el rito católico con Hailey Baldwin. No es algo que vaya mal en su matrimonio, sino que tiene varias prioridades ineludibles: y con ello recuperar su salud mental, aseguran amigos de la pareja que los ven tan enamorados como el día en que se casaron por el civil, en septiembre del año pasado.
De acuerdo con estas fuentes, el intérprete de varios éxitos pop juveniles como "Love yourself" atraviesa por una profunda depresión de la que busca salir con tratamiento médico, meditación y produciendo música. La situación está bajo control y el cantante se siente menos estresado. Lo mejor de todo es que cuenta con el respaldo de su amada, quien no ha puesto condiciones para mantenerse a su lado. Justin ama su carrera como cantante pero nada más le satisface que darse su tiempo y realizar sus actividades personales sin ser molestado y criticado. Esperemos pronto tengamos de vuelta al músico y nos siga trayendo nueva música.