Esta raza no fue reconocida por el Kennel Club británicosino hasta 1924. Sin embargo, entre los siglos XV y XVI existían en la península ibérica unos perros de características muy similares al Bullmastiff moderno, los perros de toros. Se dice que en el ajuar de la futura esposa de enrique VIII, Catalina de Aragón, se incluyeron varios de ellos. Tras la abolición de las peleas de perros, muchas de estas razas desaparecieron.
A principios del siglo XVIII, los guardabosques ingleses empezaron a seleccionar un tipo de perro al que llamaron perro de noche del guardabosques , el cual ayudaba a apresar a los cazadores furtivos. A la fecha, la raza ha conservado muchas de las características físicas y de temperamento de aquellos perros de los protectores de los bosques.