Charles Rane está considerado uno de los más peligrosos terroristas del mundo. Custodiado por agentes federales, Rane es trasladado a los Ángeles en avión para ser juzgados por los crímenes cometidos. A pesar de las medidas de seguridad, Ranes consigue liberarse y se apodera del avión, pero no cuenta con que en el mismo vuelo, sentado en el asiento número 57 viaja John Cutter, un especialistas en lucha antiterrorista.